Microbiota e Inmunidad

¿Cómo las bacterias producen cambios en órganos externos?

 

En numerosos artículos se ha comentado cómo el cuerpo humano, incluido el intestino, la piel y otros ambientes de la mucosa está colonizado por una enorme cantidad de microorganismos denominados microbiota.

Por otro lado, el sistema inmune de los mamíferos supone una red compleja de componentes innatos y adaptativos en todos los tejidos.

La microbiota juega un papel vital en la defensa del huésped contra agentes externos potencialmente dañinos.

Cuando se pone foco en la evolución de diversos seres vivos, se descubre un claro avance simultáneo de estos mamíferos y los microorganismos. Es decir, “crecieron” juntos a lo largo del tiempo como especie mutualista para obtener beneficios el uno del otro. Incluso cada vez hay más presencia de numerosos trabajos científicos que reflejan la importancia de los microbios para el desarrollo del sistema inmune en la infancia asentando, así, la certeza de que son gran parte de la fisiología humana.

Interacción de la microbiota y el sistema inmune

El sistema inmune, mayormente investigado por las interacciones huésped-microbiota en la mucosa intestinal, tiene la capacidad de establecer tolerancia hacia una cantidad enorme de microorganismos inofensivos; sin embargo, responde ferozmente a comensales patógenos o intrusos.

En un estado saludable, la respuesta inmune del huésped está compartimentada con la superficie de la mucosa intestinal. Esta se compone de una densa capa de moco que separa el epitelio intestinal de los microbios residentes.

Organizada, además, alrededor de una mucina hiperglucosilada (MUC2) que no sólo ofrece protección y blindaje estético sino que también limita la generación de respuestas inmunes a través de inducir un estado antiinflamatorio de las células dendríticas entéricas.

Se muestran interacciones seleccionadas de sistema microbiota-inmunológico bien caracterizadas mecánicamente

Influencia de la perturbación del microbioma ambiental en el sistema inmune

La interacción entre el microbioma y el sistema inmune parece ser digna de objeto de investigación. Los microbios influyen tanto en la respuesta inmune innata como en la adaptativa y tienen una capacidad moduladora que será positiva o negativa dependiendo de la existencia del equilibrio microecológico intestinal.

En la actualidad se comprende que existen una gran variedad de factores que impactan en el correcto estatus de la microbiota.

Impactos ambientales nocivos donde destacan:

  • · Antibióticos
  • · Dieta

Desde hace decenas de años los antibióticos son un tratamiento indispensable contra las enfermedades infecciosas y su introducción ha cambiado drásticamente la atención médica y la esperanza de vida.

Sin embargo, la evidencia sugiere que el uso de antibióticos durante la infancia está asociado con el desarrollo de una variedad de enfermedades inmunomediadas, incluidas alergias y la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII). La ingesta de antibióticos afecta profundamente la composición y la función de la microbiota intestinal, y puede introducir efectos adversos duraderos en el huésped.

Distintos subconjuntos y funciones de las células inmunes pueden verse alterados por la disbiosis microbiana intestinal impulsada por estos fármacos.

La dieta también es un factor doble filo.

Puede tener un papel protector de la salud intestinal y global del huésped o puede tener un efecto contrario. Estudios recientes comenzaron a desentrañar los vínculos entre la modulación de la microbiota en la dieta y la inmunidad. Por ejemplo, parece verse que una dieta alta en grasas saturadas aumenta los niveles de ácido taurocólico, un ácido biliar secundario y, a su vez, fomenta la expansión de Bilophilawadsworthia.

Este microorganismo patógeno promueve respuestas inmunes de tipo Th1 (inflamatorias) y aumenta la susceptibilidad en la colitis en ratones. Además, parece que también puede agravar la enfermedad en colitis murina inducida químicamente al alterar el equilibrio de las células dendríticas y reducir los niveles de butirato y ácido retinoico.

Desregulación de la interacción microbioma-inmunidad en la enfermedad

Conclusiones:

El hecho de que la investigación avance hacia el descubrimiento de las rutas moleculares por las que diferentes cepas pueden interferir en la fisiología humana es fundamental para la elaboración de estrategias clínicas efectivas. Los comienzos fueron con transplantes de microbioma fecal pero, sin duda, habrá nuevas y diferentes opciones de aquí a corto plazo para aprender a gestionar y cuidar esta microecología que ha evolucionado a la par que los mamíferos.

#RecuperatuInstinto #NutricióndePrecisión

Bibliografía:

Zheng, D., Liwinski, T. y Elinav, E. Interacción entre microbiota e inmunidad en salud y enfermedad. Cell Res 30, 492–506 (2020). https://doi.org/10.1038/s41422-020-0332-7

Remitente, R., Fuchs, S. y Milo, R. ¿Estamos realmente superados en número? revisando la proporción de células bacterianas a células huésped en humanos. Cell 164 , 337–340 (2016).

Integrativo HMP (iHMP) Research Network Consortium. El proyecto integrador del microbioma humano. Nature 569 , 641–648 (2019).

Hacquard, S. y col. Microbiota y nutrición del huésped en los reinos de plantas y animales. Cell Host Microbe 17 , 603–616 (2015).

Lynch, JB &Hsiao, EY Microbiomes como fuentes de fenotipos emergentes del huésped. Science 365 , 1405–1409 (2019).

Scroll al inicio
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad