EL ZINC EN LAS ABEJAS Y MICROORGANISMOS
El zinc, un mineral de carácter metálico es un elemento común en la corteza terrestre.
Este hecho le hace estar en prácticamente todos los ecosistemas donde se encuentran los seres vivos.
Incluyendo plantas, animales, insectos e incluso microorganismos.
Se podría catalogar como un nutriente esencial para la vida.
Las abejas, por ejemplo, consiguen el zinc del néctar de las plantas.
Lo transportan hacia la colmena y allí se usa para digerir la miel o para crear jalea real.
También, existen microorganismos que usan el zinc para su propio beneficio.
Algunos de ellos son capaces de acumular grandes cantidades de este metal y sobrevivir en entornos donde otros no pueden.
A este proceso se le denomina «resistencia microbiológica al zinc».
Pero… ¿Qué ocurre con el zinc (Zn a partir de ahora) en la salud humana?
ZINC EN LA SALUD HUMANA
El Zn es el segundo metal más abundante en el organismo detrás del hierro.
Se usa para multitud de tareas fisiológicas como:
- Síntesis de proteínas
- División celular
- Crecimiento
- Reparación de tejidos
- Cicatrización de heridas
- Percepción del gusto y el olfato
- Regulación del sueño y del estado de ánimo
Además, participa en la correcta función de más de 300 enzimas (compuestos moleculares que facilitan las reacciones químicas en el organismo).
Un dato curioso es que, a diferencia del hierro, no se dispone de almacenes de zinc conocidos.
Este hecho obliga a los seres vivos a ingerirlo o absorberlo constantemente.
La deficiencia de zinc en las personas parece propiciar problemas dermatológicos, inmunitarios, oculares, metabólicos, etc.
Sin embargo, la sobrecarga de zinc también está asociada a circunstancias adversas en salud como:
- Problemas gastrointestinales
- Menos absorción de otros minerales como el Cobre o el Hierro
- Anemia ferropénica
- Insuficiencia renal
ALIMENTOS Y CDR
Cuando se disponen de niveles bajos de Zn, es importante realizar un correcto abordaje nutricional que ayude a recuperar los rangos adecuados de este relevante nutriente.
Para ello, dejo un listado de alimentos ordenados de más a menos zinc:
- Ostras
- Carne de res
- Semillas de calabaza
- Nueces
- Cacao en polvo
- Champiñones
- Lentejas
- Garbanzos
- Espinacas
Las organizaciones comentan que se debería de ingerir diariamente entre unos 8 y 11 mg/día de Zn aunque la edad y otras condiciones especiales hacen que estos números varíen de forma importante.
Recuerdo de nuevo la importancia de conocer previamente cómo están los niveles de Zn para poder hacer un abordaje apropiado.
El consumo frecuente de estos alimentos disponiendo de una sobrecarga de Zn puede ser un impacto negativo para la salud.
Las personas que sufren sobrecarga de Zn suelen experimentar síntomas como:
- Náuseas
- Vómitos
- Pérdida de apetito
- Dolor abdominal
- Diarrea
- Dolor de cabeza
- Fatiga
MONITOREO ANALÍTICO Y SINTOMATOLÓGICO DEL ZINC
Como siempre digo:
Lo que no se mide, no existe.
Para conocer si se disponen de niveles adecuados de Zn hay diferentes posibilidades, algunas más precisas y otras bastante menos.
- Realizar un análisis de sangre y valorar los niveles de este metal en plasma. Menos de 70 mcg/dL de Zn suponen una clara deficiencia (información inmediata del momento de la extracción).
- Realizar un análisis de minerales en cabello. Menos de 50mcg/g suponen también una clara deficiencia (información de hace 15–30 días).
- Valorar señales y síntomas como: disminución de apetito, bajo peso, bajo crecimiento en niños, baja cicatrización de heridas, debilidad del sistema inmunológico, cambios en la piel o el cabello y dificultad de concentración y/o memoria.
PATOLOGÍAS ASOCIADAS
Tanto la sobrecarga como la deficiencia de Zn está ampliamente estudiada desde hace décadas.
Podemos destacar algunas alteraciones en salud que están completamente asociadas con esta desregulación nutricional:
- Artritis reumatoide
- Enfermedad de Crohn
- Asma
- Dermatitis
- Acné
- Úlceras
- Enfermedad cardiovascular
- Alzheimer
- Párkinson
- Esclerosis múltiple
- Diabetes
- Enfermedades oculares
- Hepatitis
- Enfermedades autoinmunes
- Disfunción eréctil
- Problemas del crecimiento
USOS CLÍNICOS DEL ZINC
¿En qué momento el Zn puede ser beneficioso en suplementación o dosis más altas?
Parece que algunos trabajos reflejan que la diarrea infantil, las infecciones recurrentes, el acné, la prevención de la pérdida de visión o la mejora de la fertilidad masculina pueden ser situaciones clínicas oportunas para valorar la inclusión de Zn.
Las cantidades manejadas en estudios son de 10 a 50mg/día aunque a veces se han llegado a utilizar cantidades de hasta 100mg/día para situaciones clínicas concretas.
Otro aspecto relevante es la forma en la que se incluye el Zn en estas investigaciones.
Se suele usar el citrato de Zn o el Zn liposomado.
CONCLUSIONES
Nos encontramos frente a un nutriente altamente importante para la salud pero con el que hay que tener extremo cuidado.
Tanto las personas como muchos profesionales se suplementan o suplementan a sus pacientes sin un riguroso manejo de las variables clínicas pertinentes.
Este hecho no solamente propicia una pérdida económica para el que lo implementa sino que también pone en riesgo la salud en un alto porcentaje de los casos.
Medir antes de plantear cualquier estrategia es la premisa que debería de seguir todo aquel que piense en el Zn como herramienta para mejorar o potenciar su salud.
BIBLIOGRAFÍA
Discovery of Human Zinc Deficiency: Its Impact on Human Health and Disease
Zinc deficiency and cellular oxidative stress: prognostic implications in cardiovascular diseases
Zinc Status and Autoimmunity: A Systematic Review and Meta-Analysis